Un policlínico que le cambiará la cara
23/12/2010 • General
Entre los problemas a tratar se encuentran el crecimiento excesivo de alguna de las mandíbulas.
Marcela Sáez tiene 18 años. Aunque nunca la molestaron en el colegio por tener la mandíbula de abajo más adelante que la de arriba, ella quería hacer algo para solucionar este problema. La principal dificultad que tenía era para comer, pues sus dientes no estaban correctamente alineados.
Su caso fue tomado por el Policlínico de cirugía maxilofacial, que desde agosto de este año funciona bajo el alero del departamento de odontología de la Universidad de la Frontera.
Más que una cara linda
Sergio Olate es el odontólogo que está a cargo del policlínico. Dice que en los cuatro meses que llevan funcionando han atendido a unos 30 pacientes con un problema similar al de Marcela.
“Estamos desarrollando investigación para determinar la severidad de estas alteraciones en nuestra Región”, comenta Olate. No obstante, menciona que las estadísticas mundiales hablan de que el 25 por ciento de las personas tendría indicación de tratar las deformidades faciales de forma quirúrgica.
David Thomas, otro de los especialistas que trabaja en este policlínico, menciona que tener un problema de este tipo (conocidos popularmente como los “papiches” o los “cara de pájaro”) trae una serie de inconvenientes.
Dice que el primero es psicológico, ya que la mayoría de las personas que sufren de estos problemas son acosadas por su aspecto físico. Sergio Olate menciona que incluso están tratando a dos pacientes que sufren de bullying por ello.
Thomas comenta que las otras complicaciones van desde problemas para masticar los alimentos hasta deformaciones a la columna por una mala postura.
Por eso el equipo de profesionales, compuesto por cuatro cirujanos máxilofaciales decidió ocuparse de este tema. A través de convenios con el sistema privado pueden realizar las operaciones en centros médicos particulares y atender a los pacientes a un menor costo.
Olate explica que un tratamiento de estos tiene un costo cercano a los cinco millones de pesos. El trabajo que ellos realizan sale entre 1,2 y 2,5 millones de pesos.
Cambios positivos
Marcela esta feliz. Dice que su cara tardó solo dos semanas en deshincharse después de la operación. Aunque en un principio no notó una gran diferencia, dice que ahora se ve diferente, pues le cambiaron hasta los pómulos y la nariz. Su historia, desde ahora, podrá repetirse en los que lleguen al policlínico.
Webliography:
El Austral, el Diario de La Araucanía, Temuco, Chile. (23 de diciembre de 2010). Recuperado de http://www.australtemuco.cl/prontus4_noticias/site/artic/20101223/pags/20101223013306.html